La arquitectura y ambiente se integran en una única pieza urbana, diseñada para fusionar la naturaleza con la actividad pedagógica. Este sistema adopta una propuesta paisajística basada en corredores arborizados que revitalizan el curso de la quebrada existente, generando áreas de sombra y extendiendo esta conexión ecológica hasta la terraza jardín en el nivel superior, quinta fachada.

Las franjas verdes de especies nativas que acompañan el parque perimetral, se incorporan como elementos clave del proyecto, formando un tejido ambiental que conecta los patios con el paraje natural.

La superficie de envolvente incorpora estructuras verticales multicolor, microperforadas, atendiendo al control climático, a la relación con el entorno y carácter institucional educativo. La fachada es un entramado pedagógico, modular y dinámico.

No es un edificio, es un sistema funcional, flexible, didáctico, representativo, orgánico – respuesta a recomendaciones concretas, estructura que se relaciona con el contexto natural inmediato.